LOS 4 ELEMENOS + ÉTER

En Astrología, los cuatro elementos son una herramienta clave para entender la personalidad y las características de cada arquetipo astrológico, o , en otras palabras, de cada constelación. Estos cuatro elementos son el fuego, la tierra, el aire y el agua. En esta clase, iremos un paso más allá de comprender estos 4 cualitativos, para unificarnos con el éter, el corazón de nuestra carta astral y la energía que nos unifica con el todo, aún teniendo más actividad en un elemento u otro.

El fuego se asocia con la pasión, la energía y la creatividad. Las personas que tienen una fuerte presencia de fuego en su carta natal suelen ser impulsivas, entusiastas y aventureras.

La tierra se asocia con la estabilidad, la seguridad y la practicidad. Las personas que tienen una fuerte presencia de tierra en su carta natal suelen ser realistas, trabajadoras y confiables.

El aire se asocia con la comunicación, la inteligencia y la sociabilidad. Las personas que tienen una fuerte presencia de aire en su carta natal suelen ser intelectuales, curiosas y amistosas.

El agua se asocia con la emoción, la sensibilidad y la intuición. Las personas que tienen una fuerte presencia de agua en su carta natal suelen ser empáticas, creativas y emocionales.

Es importante tener en cuenta que todas las personas tienen una combinación de estos cuatro elementos en su carta natal, y que no hay una combinación “mejor” o “peor”. Cada persona es única y tiene una combinación única de elementos que influyen en su personalidad y características. Los astrólogos utilizan la interpretación de los cuatro elementos para ayudar a las personas a comprenderse a sí mismas y a los demás.

Ahora, hablemos del 5º elemento…

El éter es a menudo considerado como el quinto elemento en la astrología y otras tradiciones espirituales y filosóficas. Aunque no se trata de una sustancia física, el éter se asocia con la idea de un “espacio sutil” que permea todo el universo.

En la astrología, el éter se relaciona con la energía cósmica que se extiende más allá de los límites de la Tierra y los cuerpos celestes, y que une a todo en el universo. Se considera que el éter influye en la forma en que las personas se conectan con el universo y entre sí, y se asocia con la intuición, la percepción y la conciencia espiritual.

El éter también se conoce como el quinto elemento en la tradición hindú, donde se lo llama akasha. Según esta tradición, el akasha es el espacio cósmico que contiene todas las formas y todas las posibilidades, y que es la base de todos los demás elementos.

Aunque el éter no se considera un elemento físico, se le atribuyen propiedades importantes en la astrología y otras tradiciones espirituales. Se cree que el éter es la esencia primordial del universo y que es una fuerza poderosa en la vida de las personas.